Santander 05-09-2018
Comenzando el nuevo curso político, hemos mantenido una reunión con el Director General de Transportes del Gobierno de Cantabria, Don Felipe Piña.
Básicamente la reunión discurrió sobre un tema de relevante importancia, como es, el próximo decreto de integración entre líneas regulares de débil tráfico y el transporte escolar, y el futuro de las concesiones de las líneas regulares de la Comunidad Autónoma.
El decreto, todavía pendiente de aprobación, será un cambio de modelo, por lo que desde la dirección general se nos indicó, que dicho cambio será paulatino, teniendo un periodo de pruebas y adaptación al mismo. Para nosotros es muy importante conocer a qué líneas afectaría y en qué forma se hará la integración, en tanto en cuánto pueda tener incidencia (que lógicamente tendrá) en los trabajadores, tanto cuantitativamente como cualitativamente.
Otro punto fundamental, en el cual ya hicimos hincapié en la Consejería de Educación en la otra reunión previa del verano, nos parece la introducción en las condiciones técnicas de los pliegos, la obligatoriedad del tacógrafo digital y el obligado uso por parte de los conductores. Aunque el transporte escolar, debido a su radio de acción inferior a 50km, y las líneas regulares que cumplan el mismo supuesto, no estén obligados a las normas que regulan su uso, el propio tacógrafo digital dispone de un mecanismo (modo OUT) con el que se permite el control de la jornada sin registrar las infracciones propias de los tiempos de conducción y descanso que rigen el 561/2006 de la UE. Sería una herramienta eficaz para un correcto control de jornadas, en el sentido que marca la Comisión Europea
Otro punto que tratamos con el Señor Piña, fue el tema de las asignaciones de los trabajadores a las concesiones. Como manda la UE, los trabajadores que realicen líneas regulares deben de consignarse a una concesión, y ella debe de figurar en las nóminas de los trabajadores. Encomendamos al director para forzar a las empresas que no lo hagan, a llevar a cabo este imperativo legal. Además, solicitamos, que en consonancia con Educación, no hubiera solapamiento en la adscripción a una concesión de línea regular y a una ruta escolar, en favor de la primera. Es decir, que un conductor adscrito a la concesión X, no pudiera estar adscrito a un servicio escolar. Con ello se evitarían picarescas y problemas a la hora de aplicar las cláusulas de subrogación.
Por último, de cara la licitación de las nuevas concesiones a futuro, propusimos sobre la mesa, la idea de que un aspecto a valorar muy positivamente de cara a los puntos de los pliegos, fuese la “estabilidad” laboral de la empresa concursante. A nuestro criterio, no es tan importante el si los trabajadores son muy antiguos, o son jóvenes, sino que sean una plantilla estable, en donde el indefinido sea la nota preponderante.
El director general nos transmitió su buena disposición y que estudiarían todas nuestras propuestas con sus gabinetes técnico jurídicos y con las demás administraciones que intervienen en el tema tratado, aunque cabe resaltar la buena acogida de las mismas, y que fueron acogidas como medidas sensatas y en buen camino.
Como siempre, desde SCAT seguiremos estudiando el camino emprendido, velando por nuestro mayor objetivo como organización, un empleo digno, basado en la calidad y estabilidad.